Preámbulo

Nuestra ilusión era conectar Murcia con la TransAndalus a través de Caravaca de la Cruz, para poder llegar a Sevilla.
A día de hoy, nuestra esperanza es poder seguir descubriendo los idílicos paisajes que la ruta TransAndalus nos ha regalado.
Sirvan estas líneas de agradecimiento a Fran y a todo su equipo, por la encomiable labor que han realizado "pariendo" la ruta TransAndalus.
Y gracias a todos los que nos habéis ayudado y alentado en este proyecto tan maravilloso

Los bikeros

Tras dos Caminos de Santiago, el cuerpo nos pedía algo distinto, al final nos juntamos Iñaki de Miguel (un Guiputxi incansable) , Juan Grande (la chispa del viaje), Paco López (el GPS humano, que nos guió por sendas desaparecidas), Julio Vizuete (el padrazo, que nos aguantó a todos), Gaudencio Herrero (el conseguidor, sin el que no hubiéramos aguantado la ruta) y yo mismo Paco Pagán (....)

1. Etapa Murcia - Caravaca de la Cruz

Fecha: 13 de Junio de 2007.
Kilómetros: 95 Km
Las fotos de la primera etapa: http://picasaweb.google.es/fpaganvalera/01_MurciaCaravaca9497Km

La crónica de la etapa:
A las 8:30 de la mañana salimos desde la fachada barroca de la Catedral de Murcia, en dirección a Caravaca de la Cruz, cargados de ilusión y barritas energéticas. Algunos todavía no se creían que "la parienta" les permitiera meterse en esta aventura.

Salimos de Murcia, por el carril bici que badea el río Segura en dirección a Molina de Segura. Al llegar a la altura de la Contraparada, nos salimos de la mota del río para aproximarnos al Km. 16 y reponer fuerzas en un bareto de la huerta de la Ribera de Molina, la cosa prometía, no habíamos andado 16 Km. y ya estábamos comiendo, de aquí a Alguazas la carretera está en muy buen estado y con poco tráfico.
Una vez en Alguazas tomamos dirección hacia Campos del Río por la comarcal MU-531. Al parecer nuestros políticos no son capaces de entender lo genial que sería conectar la Vía Verde del Noroeste (que está operativa a partir de Albudeite), con Murcia. Conseguirían un corredor natural para el disfrute de todos los murcianos de 90 Km., pero ése es otro cantar, vuelvo a lo mío que es contar nuestra ruta.
En fin, tomamos la carretera y tras pasar por debajo de la vía del tren que une Murcia con Madrid, paramos en la gasolinera que está al salir del pueblo a comprar hielo para las mochilas de agua, por cierto imprescindible llevar mochilas de agua de 2L como poco.
Por fin parecía que arrancábamos, pero Iñaki tenía problemas técnicos con su Merida y Juan se nos pegó el primer golpe al parar a revisar la bicicleta de Iñaki.
Seguimos por la carretera comarcal MU-531 que nos lleva a Campos del Río, donde el secano es parecido a un paisaje lunar, (en referencia a aquellos terrenos donde la reducida vegetación y las continuas riadas han contribuido a la formación de paisajes llenos de concavidades) desde allí pasando por el pantano de Los Rodeos y por la planta de aguas residuales, un poco más adelante dejamos la carretera en el Km. 10 para tomar la carretera local B-31, que nos desvía por la urbanización Los Rodeos y nos permite relajarnos evitando el poco tráfico que tiene la carretera anterior, además podemos observar algunos tramos abandonados de la antigua vía férrea que unía Murcia con Caravaca.


El campo se vuelve árido y seco, y sólo podemos observar el esparto. Es importante destacar el primer 15% de desnivel que tenemos al entrar a Campos del Río, no muy largo, pero se pega. Cruzamos el pueblo por su arteria principal, que de nuevo es la comarcal MU-321, que ahora nos llevará hasta Albudeite. Antes de llegar a ésta localidad, disfrutaremos de una prolongada bajada que nos llevará hasta el río Mula, cruzaremos el río por un primer puente, para luego atravesar el pueblo y volver a cruzar el río Mula, subiendo de manera continua hasta la antigua estación del tren.
Punto de partida de la Vía Verde del Noroeste, a partir de aquí retomaremos la tierra y disfrutaremos de un paisaje muy peculiar, varios puentes nos permitirán atravesar el barranco del Moro, desde donde podemos observar una vista inmejorable del aprovechamiento de lo que aquí llamamos “tierras baldías”, otro puente nos permite contemplar los Baños de Mula desde lo alto. A partir de aquí es prácticamente imposible perderse, pues la Vía Verde, aunque deficientemente acondicionada, está bien señalizada.
Mula nos saluda al entrar con su rica huerta, aunque atravesarla es otro cantar, la señalización desaparece como ocurre en todas las rutas a la hora de atravesar una población más o menos grande, en este caso no iba a ser menos, y la solución pasa por tomar como referencia el Castillo de Mula y una vez que llegamos a la carretera principal, girar a la izquierda camino del Niño de Mula por la comarcal C-415a.
En cuanto observemos el Santuario giraremos a la izquierda tomando el tramo bueno de la Vía Verde que nos llevará hasta Caravaca de la Cruz. Iremos cruzando varios túneles hasta llegar a Bullas, famoso por su vino y su huerta, en este punto se hace necesario reponer las fuerzas, pues el calor y las fuerzas escasean. En el Hotel San José, no solo nos dieron muy bien de comer, sino que nos dejaron meter las bicicletas en el Hotel y reponer fuerzas en los cómodos sofás de su cafetería.
Debido a los treinta y tantos grados que teníamos en la calle, aguantamos hasta las seis de la tarde para reanudar la marcha, salimos del pueblo por el cementerio... Pasamos junto a un "huerto solar", prueba inequívoca del afán innovador del pueblo murciano, cambiamos melocotoneros por placas solares... En fin, el trozo de Bullas a Cehegín, es benévolo con las piernas, dejándonos soltarlas y disfrutar del paisaje, bosque mediterráneo entremezclado con árboles frutales. Antes de llegar a Cehegín visitaremos los retos de Bigastri, la ciudad romana y visigoda, sede obispal hasta la invasión morisca.
De Cehegín a Caravaca de la Cruz es un paseo, un consejo, no os metáis hasta el apeadero de Caravaca de la Cruz, actualmente asentamiento de "sin techo", es mejor seguir recto hasta el centro de Caravaca y de allí subir al Santuario de la Vera Cruz, punto final de la etapa.
Como no sólo de pedalear vive el hombre, tenemos que contar que nos hospedamos en el Hotel Rural de La Fuente del Marqués, tras la ducha regeneradora nos lanzamos a buscar un "lugar curioso" en el centro de Caravaca y la verdad es que nos fue muy bien, cenamos de tapeo con un buen vino y un exquisito queso y otras maravillas gastronómicas.

2. Etapa: Caravaca de la Cruz - Pontones

Fecha: 14 de Junio de 2007
Kilómetros: 83.54 Km
Las fotos de la primera etapa: http://picasaweb.google.es/fpaganvalera/02_CaravacaPontones

La crónica de la segunda etapa:
A las 9:15 de la mañana salimos de Caravaca de la Cruz, con las mochilas llenas de agua y bien alimentados. El día estaba soleado, con buena temperatura, pero con un incipiente viento de cara que poco a poco fue subiendo de fuerza y "aflojándonos" a nosotros.
Desde Caravaca, tomamos el Camino Viejo de Archivel (CR-III-5) en dirección a Archivel, en mal estado para los vehículos de cuatro ruedas, pero por el contrario ideal para nosotros. Paralelos al río Argos, fuimos avanzando entre campos de cereales y el viento de cara, dejamos a la derecha Benablón y siguiendo por la carretera llegamos a Archivel, ya una vez en el centro del pueblo, buscamos un bar donde meter hielo a las mochilas de agua. Al salir del pueblo tomamos camino hacia Noguericas, siguiendo hasta la Ermita de San Javier, la carretera se conviere en una pista que nos llevará por el Cortijo de los Derramadores hasta la Casa de la Vidriera, atravesamos una finca privada, y nos adentramos en plena sierra, por la Rambla de la vidriera, para salir de ella por la Fuente de la Vidriera, pendientes del GPS, que de momento se estaba portando.
La verdad que este tramo fue de los más bonitos del día, seguir el curso de la rambla con el agua debajo de la pedriza y la sensación de que si nos habíamos perdido no nos iba a encontrar ni la Guardia Civil, fue breve, pero intenso.
Salimos de la rambla y nos incorporamos a la carretera comarcal que nos llevó hasta el cruce de Tartamudo, aquí Juan se saltó el cruce y Julito en un afán quijotesco, se lanzó a la caza de Juanito gritando contra el viento, el pobre se fundió gritando y corriendo detrás de Juanito, hasta que decidimos llamarlo al móvil de Juan para que se diese la vuelta.
Bueno, tras el primer despiste, retomamos el camino en dirección a Tartamudo. Seguimos el GPS, por el Camino del Moral a Archivel, pista en buen estado con constantes sube y baja. Por fín llegamos a Hornico, enteros pero algo deshidratados, y con la sensación de que Cañada de la Cruz se encontraba a la vuelta de la esquina, no íbamos mal encaminados, siguiendo la carretera llegamos a Cañada de la Cruz sobre las 14:30 horas, en esta pequeña población a la falda de Revolcadores, la temperatura a esta hora era de unos 36 grados, la suerte fue que el aire soplaba de noroeste y enfriaba un poco el ambiente. Aquí cometimos el primer error, sobrevaloramos nuestras fuerzas y pensamos que podíamos seguir hasta enlazar con la Comarcal A-317 que une La Puebla de Don Fabrique con Santiago de la Espada, en ese punto de unión con nuestra ruta, habíamos quedado con Gaudencio para comer, pero restaban unos 36 Km hasta llegar al cruce, unas dos horas, sin aire de frente y pendientes del 15 y el 20%. La Sierra de las Cabras, hace honor a su nombre, pues tan solo vimos cabras...

Con unas barritas en la barriga y otras en el maillot nos lanzamos hacia La Fuente de la Carrasca, que estaba a 16 Km y de allí a unos 10 Km se encontraba La Hoya del Espino de Arriba (cortijo abandonado donde debíamos haber girado a la izquierda por una pista de tierra), 40 grados a la sombra y con el viento de cara, tan solo nos quedaba el consuelo de que a unos 10 Km teníamos a Gaudencio esperándonos para llevarnos a comer, las barritas escaseaban, la cuesta arriba no paraba y cuando tomamos la primera bajada, Juanjo se lanzó a tumba abierta, y se escapó como una bala.Mal tiro le peguen, el muy jodío se pasó el cruce y nos planteó la siguiente duda, vamos a por él, o lo dejamos que se lo coman los lobos....
No hubo más remedio que intentar alcanzarlo, pero cuando nos reagrupamos, estábamos unos cuantos km cuesta abajo y no era plan de dar la vuelta ("equivocación", más vale malo conocido que bueno por conocer y más si se va con el estómago vacío).
No sólo no tuvimos que subir, sino que a partir de este punto nos metimos entre pecho y espalda unos treinta y tantos kilómetros de repechitos del 15%, 20% y 25%. Para cansar a un bendito y sin comer, en definitiva que por no volver y seguir el GPS, nos fuimos por la Sierra de las Cabras, a Hoya del Espino de abajo, Cañada de Abajo, donde una amable señora nos indicó que si seguíamos por la carretera llegaríamos a Pontones; en Cortijo Nuevo, otra buena señora y su perro, nos indicó que estábamos a unas tres horas en coche de Santiago de la Espada y a unas cinco en bicicleta (nuestro desconocimiento era tal que no sabíamos que estábamos a unos 15 Km de Nerpio) y tomamos la carretera como nos indicó la lugareña hacia la izquierda intentando conectar con Santiago de la Espada, subiendo y subiendo.... Y siempre que preguntamos, bueno a los tres coches que se nos cruzaron y paramos, estábamos a 6 Kilómetros del cruce.
Tras 3 Km llegamos a Los Poyos y de allí seguimos subiendo hasta que a unos 18 Km encontramos un cortijo llamado "Los González", por fin, la cordura se impuso y tras indicarnos dónde nos encontrábamos llamamos a Gaudencio para que pasara a recogernos con la furgoneta, Super-Gauden ya había movilizado a la Policía Local y Guardia Civil (un monstruo), desde el cortijo nos quedaban aún cuarenta y tantos kilómetros para llegar a Pontones, y la noche ya estaba encima….
Tampoco era cuestión de que nos comieran los lobos el segundo día….
En Pontones, dormimos en la Casa Rural, xxxxx, donde nos atendió con mucha cortesía y esmero xxxxxx, gracias a la copiosa cena y al sueño reparador pudimos recuperar fuerzas para el día siguiente. Pero ésa es otra historia.

3. Etapa Pontones - Beas del Segura

Fecha: 15 de Junio de 2007
Kilómetros: 79.20Km
Las fotos de la tercera etapa:
http://picasaweb.google.es/fpaganvalera/03_PontonesBeasDelSegura

La crónica de la tercera etapa:


"SUSPENDIDA POR INCLEMENCIAS
METEREOLÓGICAS..."


A las 7:00 de la mañana nos levantamos con la ilusión de comenzar la TransAndalus y dejar atrás la mala experiencia del día anterior, a nadie le gusta dejar a medio algo y mucho menos si lo que te dejas es algo tan bello como las bajadas desde Santiago de la Espada a Pontones, y cómo no las subidas a Pontones...


Pero no me enrollo, nos vestimos de guerra y nos fuimos a desayunar, con el ánimo como el de las choperas que teníamos enfrente del hotel, tumbadas. Y es que, llovía y soplaba un fuerte viento del norte, vamos que teníamos "el palomo" encima y no tenía pinta de escampar, pero nosotros con los culotes puestos y con pinturas de guerra.

Al final se impuso la cordura y decidimos por unanimidad, intentar llegar hasta Hornos en furgoneta y realizar el segundo tramo desde Hornos hasta Beas del Segura.

Como podemos observar en la foto de la izquierda la borrasca intenta salir de Cazorla, por la cola del Pantano del Tranco.

En resumidas cuentas, quedan estas dos etapas para el año que viene...